Blogia
CuquiSalud

Reidel nació en Camagüey y en Taguasco

Reidel nació en Camagüey y en Taguasco

En el montaje fotográfico encontramos arriba a los doctores Queipo y Lener;  abajo se observa la flecha que señala el círculo donde se encuentra la imagen de la piedra de esmeril que le atravesó la pared medial de la cavidad orbitaria y la base cerebral anterior tomada por el TAC; y al lado Reidel.

En ocasiones uno conoce a familias que desde la primera vez te impactan porque te hacen sentir parte de ellas aunque sea por poco tiempo. Eso me sucedió en la casa de Reidel Nápoles Brizuela, de 24 años de edad. Por supuesto, hubiera preferido no tener que conocerlo a él, a su esposa y a su linda bebita, debido a la causa que me llevó hasta ese hogar.

A Reidel solo lo vi una vez en su casa. Me impresionó como un joven alegre, optimista, emprendedor y persistente. Él es amolador y trabaja por cuenta propia. Dice que heredó ese oficio de su abuelo materno.

Supo por unas amistades en Taguasco, municipio de Sancti Spíritus, que tendría un buen sitio para trabajar y lo hizo. El 16 de junio último comenzó con su piedra de esmeril y otros implementos y se posesionó de su nuevo lugar de labor. Al día siguiente la vida le cambió.

Él me comentó: “Quise montar mi negocio en ese sitio, pero no tenía todas las condiciones creadas. Utilizaba unos espejuelos de acrílico y orejeras, no la careta de ese material porque no lo hay y tampoco tenía el peto de cuello”.

La piedra de esmeril se fragmentó y fue a dar al rostro de Reidel. Tuvo una fractura de tipo LEFORT-II —muy compleja del maxilar—; la herida se ubica en línea media de la frente hasta el labio, le comprometió la mordida y por eso hubo que llevársela a su lugar y colocarle fijadores (conocidos en Medicina como arcos de Erick), los cuales ya se les retiraron. El cuerpo extraño le interesó la pared medial de la cavidad orbitaria izquierda y la base craneal anterior.

Como es de suponer, Reidel fue llevado al centro de Salud más cercano de Taguasco, a su policlínica, donde recibió los primeros auxilios y luego fue trasladado hacia el hospital provincial de Sancti Spíritus. Allí fue intervenido quirúrgicamente por especialistas en Neurocirugía y Máxilo Facial.

“En el momento del accidente no perdí el conocimiento, solo me acalambré, sentí rigidez y caía de lado, no me podía parar. Atiné a mirarme en el espejo para ver qué ocurría y aunque parezca raro no tenía dolor. Eso sí, sangré mucho y la hemoglobina me bajó a ocho. En Taguasco y Sancti Spíritus tuve muy buena la atención, agradezco mucho a todos los que me tuvieron en sus manos. Hicieron lo correcto hasta ese momento, incluso, han llamado para saber de mí”, así dijo Reidel de los servicios de la vecina provincia.

“Como soy camagüeyano y mi familia vive aquí, en cuanto pudimos nos trasladamos hacia el hospital universitario Manuel Ascunce Domenech. Me ingresaron el día 21 de junio en la sala de Politraumatizados y traíamos el resumen de historia clínica, todo en orden. La dirección de aquel hospital y la de este entraron en contacto.

“El día 23 —añadió— me pasaron a la sala de Neurocirugía en la que estuve muy bien atendido por todo el personal bajo seguimiento y chequeos hasta que decidieron operarme de nuevo”,

Reidel aprovechó para agradecer con vehemencia al personal de la Salud de Sancti Spíritus y Camagüey. Desde enfermeras, médicos, camilleros, a todos les debe un poquito de su vida. “Ahora me queda arreglar mi dentadura que también sufrió sus estragos”, apuntó.

En el hospital recabamos del joven neurocirujano Dr. Lener de Jesús Alba Miranda, también especialista en Medicina General Integral (MGI) y del Dr. Guillermo A. Queipo Caballero, especialista en Cirugía Máxilo Facial fueron los responsabilizados como cirujanos principales en este caso. Ambos opinaron acerca del buen trabajo de emergencia realizado por los colegas de Sancti Spíritus.

Ellos estuvieron acompañados por un equipo multidisciplinario integrado por: los doctores Alfredo Guerra, imagenólogo; Ángel Naranjo, especialista en Anestesiólogo y Reanimación; y los residentes de Neurocirugía Kevin Domínguez (de Perú), Róger Téllez, Jeoffrey Portilla (de Ecuador) y Alain Martínez.

“Cuando Reidel llegó teníamos la sospecha de que le quedaba parte de la piedra de esmeril dentro —dijo el Dr. Lener—, pero en estos casos hay que esperar por ciertas condiciones debido a la inflamación, por ejemplo. Él traía el diagnóstico porque lo habían pasado por el Tomógrafo Axial Computadorizado (TAC) monocorte. Aquí le indicamos la TAC de 64 cortes y efectivamente, tenía alojado un pedazo de la piedra de unos tres centímetros. Resolvimos operarlo el 15 de julio. Le quedó una fístula —al comunicar el cerebro con las cavidades paranasales— que ya prácticamente no drena líquido cefalorraquídeo, o sea, casi está resuelta bajo tratamiento médico”.

En esta historia, cabe señalar que Reidel continuará con su oficio, e igualmente que hay muchos nombres por citar. Marila Oliva Iglesias, su esposa, menciona a Arelbe Vasilio Díaz Olivera, Julia Sánchez Díaz, Arelbe Díaz Barrios y a Arlén Asnielle Pérez, de Taguasco; también a Darilys Díaz Barrios, José Ramón Marín León y Dora Ofelia Barrios, de Sancti Spíritus. Cada una de estas personas la acogieron a ella y a su suegro y la hicieron sentir parte de sus propias familias.

Tuvo palabras de elogio para el personal de Salud de allá y de acá, en fin, el agradecimiento de tener a su esposo en casa disfrutando de María del Rosario, su bebita de un año y cuatro meses y abundó: “A todos ellos se lo debemos”.

Autora: Olga Lilia Vilató de Varona (Cuqui)

Fotos: Orlando Durán Hernández

Fotomontaje: Otilio Rivero Delgado

Imagen de la Tomografía: Cortesía del equipo médico   

2 comentarios

Cuqui -

Espe: Mil gracias por serme tan fiel. Siempre estás al tanto de las actualizaciones.
¿Viste?, un caso interesante y duro a la vez, pero todo salió bien. Cuando fui a visitar a Reidel pensé encontrarlo en peor estado y algo deprimido y nada de eso. Está feliz, nació dos veces. Estuvo en manos de buenos especialistas, pese a la juventud del Neurocirujano que es muy bueno.
Otro abrazo enorme para ti, aburrrr

Esperanza Manresa -

Hay amiga q t puedo decir!!!!maravillosa labor, y gracias a esos maravillosos médicos cubanos que desbordan talento y sabiduria, un abrazo y denas mis elogios por tu trabajo ese esta presente un abrazo enorme aburrrr